9.11.13

Qué es una fracción?

Supongo que en estos días llenos de soledad autoimpuesta aprendí más que solo a callarme y únicamente meterme en mi mente, dejar de escuchar para escucharme. Entendí la imperiosa necesidad que tiene todo el universo por meterse la idea de que algo cuando se fracciona no tiene forma de unión. Como que ½ hace que 1 sea totalmente diferente de dos, creándole una barrera imposible de cortar. Soy de la otra camada, la que cree que 0,5 siempre va a ser una mejor posibilidad. Que no hay porque dividir de esa manera tan perfeccionista y arrolladora las cosas, que se puede encontrar la estabilidad media.
Soy de las que prefieren hablar y solucionar a cortar relación. Aprendí que la gente no tiene esa capacidad. Supongo que viví 18 años y medio pensando únicamente en los demás, encontrando un
0,5 en su estabilidad y no autoimponerme la necesidad de declararme como 1 y ellos como 2. No me parecía correcto, era mejor un punto medio que le haga bien y no se sienta totalmente excluido de mi vida.
Hoy quise reparar una relación totalmente interna. Encontrar el punto medio que le haga bien y vi, sentí, olí, escuché gritando a la otra persona
DEJAME EN PAZ, DEJAME SER 1, DEJAME ENCERRARME EN LA ESTUPIDA IDEA DE QUE NO TENGO QUE PENSAR EN OTRA POSIBILIDAD. Y me alejé, asustada, llorando. Nunca nadie me hizo sentir eso como esa nena. Increíblemente chocante me llevó el alma puesta, la atravesó, la dividió.
No sé si como refugio o como símbolo de la profunda depresión que encuentro en la soledad que todo mi entorno me ofrece a cada pedido de auxilio que pido, decidí no comunicarme más allá de la vía escrita.
Me da miedo este mundo. Me da miedo saber que nunca nadie va a poder sentarse a escucharme horas como yo lo hice. A nadie le interesa mostrarte tu punto medio, meterse en tu psiquis y ayudarte a salir, tirarte una soga y enseñarte desde afuera del pozo como trepar.
Increíblemente abrumador.